GIOIA DEL COLLE
A 338 metros sobre el nivel
del mar, en el altiplano de la región de las Murge,
Gioia del Colle se sitúa a mitad de camino entre la
costa adriática y la Jónica.
A pesar de que el territorio fue habitado desde el Neolítico
y en época mesápica, como lo confirma la existencia
en el Monte Sannece de un centro peuceo del siglo VII a.C.,
el actual poblado se desarrolló a partir de un antiguo
puente construido en época bizantina (siglo VI) en
el lugar en el que surge el actual burgo de S. Nicola.
Pasó posteriormente a ser un feudo normando durante
el siglo XI período en el cual se llevó a cabo
la reconstrucción del castillo bajo el poder Riccardo
Siniscalco de Altavilla, pasó posteriormente a los
suevos (1194-1268) que se encargaron de reconstruir el castillo
que había sido precedentemente destruido por el normando
Guillermo I el Malo.
En este castillo parece que fue encerrada con la acusación
de traición Blanca Lancia, mujer del Emperador Federico
II, durante el embarazo de su hijo Manfredo que vino al mundo
en las habitaciones del castillo en 1232.
Conquistada por los angevinos en la segunda mitad del siglo
XIII Gioia se convirtió en parte del principado de
Taranto, posteriormente pasó a ser Condado de los Acquaviva
de Aragón y de los príncipes De Mari.
Participó activamente en los motines carboneros y risorgimentales
partidarios del risorgimento que llevaron a la unificación
del Reino de Italia a través del voto plebiscitario
en el 1860.
Centro de la visita de Gioia del Colle es sin duda el Castillo
Normando-Suevo, uno de los más bellos y mejor conservados
de la región, que alberga así mismo el Museo
Arqueológico Nacional donde se encuentran expuestas
las colecciones halladas en la cercana zona arqueológica
de Monte Sannace.
Interesantes para completar la visita al burgo es así
mismo la Casa Torre (siglo XV), el Arco Nardullo (siglo XIII)
y el Arco Cimone.
Entre las iglesias de visita obligada se encuentra la normanda
que actualmente presenta un aspecto barroco; la iglesia de
S. Angelo o de S. María de Constantinopla y la iglesia
Madre de S. Maria Maggiore (siglo XII posteriormente reconstruida
en el siglo XVIII), S. Antonio (siglo XVII) que conserva un
crucifijo realizado en madera y un ciclo de frescos.
En las afueras de la ciudad se puede visitar la necrópolis
dolménica de Massaria del Porto perteneciente al II
milenio antes de Cristo.
Productos locales son el vino Primitivo de Gioia del Colle
y la mozzarella fior di latte.
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