TAORMINA
Asomada al Mar Jónico
a lo largo de la costa oriental de Sicilia, Taormina ofrece
panorámicas impresionantes embellecidas por la presencia
del Etna que se yergue a pocos kilómetros de aquí.
Los griegos jónicos de Calcidia Eubea llegaron a estas
costas en el 832 a.C. fundando Naxos, la primera colonia griega
en Sicilia. Parece que a su llegada la colina de Taormina
ya hubiese sido habitada por los Siculos. No obstante la potente
Siracusa, de fundación dórica, entró
en conflicto con Naxos y, después de la primera masacre
en el 403 a.C., los habitantes decidieron emigrar a las colinas
fundando Tauomeion (358 a.C.)
La ciudad a pesar de todo permaneció en la órbita
de Siracusa hasta el final de la Segunda Guerra Púnica
con la cual Roma se anexionaba toda Sicilia (212 a.C.)
Taormina se convirtió en ciudad foederata y fue en
la historia base y refugio en un primer momento de revolucionarios
durante la guerra servil (134-132 a.C.) y posteriormente con
Sexto Pompeo, hijo de Pompeo Magno, se mantuvo en la lucha
contra Octaviano, futuro Augusto (36 a.C.)
Con la llegada del Cristianismo la ciudad se convirtió
en sede episcopal.
Después de la caída de Roma conoció la
llegada de los Vándalos y formó parte del Reino
Ostrogodo de Italia antes y del Imperio Bizantino posteriormente,
Los árabes fueron ferozmente expulsados durante años
hasta la noche de Navidad del 906 d.C. cuando, sólo
gracias a una traición, cayó y fue destruida.
Los habitantes fueron masacrados, las mujeres deportadas y
la ciudad tomó el nombre de Almoezia.
La historia se repitió con los roles invertidos en
el 1078 cuado los Normandos al mando de Ruggero I asediaron
y conquistaron Taormina,
Se subsiguieron posteriormente Suevos, Angevinos y después
de las Vísperas los Aragoneses.
Sufrió el asedio de los franceses en el 1675 y después
del breve paréntesis napoleónico en Italia volvió
a formar parte del Reino de Sicilia con los Borbones hasta
el 1860, año de la unificación de Italia.
Siendo sede del comando alemán de la Wermacht sufrió
dos bombardeos por parte de las tropas anglo-americanas el
9 de julio del 1943.
La fama de Taormina en el mundo nació como consecuencia
de las excelentes visitas que recibió la ciudad de
artistas que hicieron fortuna; Goethe, Nietzsche, Wagner,
Wilde, estos son sólo algunos de los tantos que visitaron
Taormina integrándola en sus obras.
Después del final de la guerra, Taormina conoció
la “dolce vita” albergando grandes actrices y
actores del jet set internacional.
A Taormina se va por los comentarios que animan a conocerla
como sucede en otras ciudades famosas de Italia. Pero una
visita al teatro griego es algo que fascina el alma sensible
y culto de quien viaja con las intenciones más nobles.
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